Conciertos oficiales Villanos del Jazz
Son muchas cosas las que comparten el cordobés Lin Cortés y el marroquí Saad Tiouly. Ambos son transgresores, inclasificables, imprevisibles. Es muy difícil atarles corto. Son incorregibles en más de un sentido. El primero es un especialista en mezclar jazz, soul y funk, tal y como lleva haciendo desde que publicó aquel deslumbrante debut, “Gispsy Evolution” (2014), que le valió los halagos de Vicente Amigo, El Pele, Antonio Carmona, Rosario, Kiko Veneno o Raimundo Amador. El segundo es diestro en reinterpretar desde una perspectiva contemporánea el gnawa, la tradición musical del África subsahariana, empleando para ello elementos electrónicos y psicodélicos, aunando espiritualidad, modernidad y ritmos urbanos a pleno antojo. Lo que pueda salir de la interacción de ambos titanes sobre un escenario es algo que solo puede ser irrepetible.