Conciertos oficiales
No es el estreno en Madrid del contrabajista Christian McBride, pero sí es cierto que hace mucho tiempo que no nos visitaba. Se le pudo ver en diferentes ocasiones arropando a músicos como Benny Golson, Roy Hargrove o Freddie Hubbard, pero muy pocas, sin embargo, al frente de su propio grupo. En este proyecto con el que ahora se nos presenta, anda enfrascado en una formación aventurera con la que, recientemente, se puso en gira para homenajear al histórico contrabajista Ray Brown.
Con músicos como Benny Green en el piano y Greg Hutchinson en la batería, McBride consigue un resultado fascinante en el que -aún haciendo un homenaje a un personaje clave en la historia de nuestra música- los tres muestran que el jazz del presente no es una mera repetición. Ellos lo descubren y desarrollan con irreprochable maestría técnica, pero lo hacen sin amaneramientos academicistas; como algo brotado de la realidad del presente, aún despegando de la tradición de un jazz moderno que ya cuenta con ochenta años de historia.
Benny Green es el pianista libre que monologa y rellena los espacios más vistosos. Y, poniendo el fondo movedizo de la rítmica, están, infalibles, la batería de Greg Hutchinson y, por supuesto, el contrabajo de Christian McBride, que, además de caminar con tacto por el filo de la música convenida, aporta pluses a los originales. Estos vienen en su gran mayoría de la imaginación de Raymond Mathews Brown, un músico que nació en 1926 en Pittsburg, localidad donde muy pronto se inició profesionalmente en el circuito local de clubes.
Ray Brown conoció a Charlie Parker, a Bud Powell y a Dizzy Gillespie, y ninguno de los tres dudó en introducirle en los círculos profesionales del jazz en la segunda mitad de la década de los 40. Las razones son simples: el estilo de Brown tenía muy poco que envidiar al de Oscar Pettiford, y, además, disponía de un swing que le hacía diferente a cualquier otro contrabajista. Así que, en breve, pasó a formar parte del trío del pianista Oscar Peterson, a grabar con el Modern Jazz Quartet y contraer nupcias con Ella Fitzgerald, unión que solo se prolongaría durante cuatro años: de 1948 a 1952.
Brown fue un artista de referencia y de ahí que homenajes explícitos se los haya brindado mucha gente. Desde Steve Grossman, a Miles Davis, sin olvidar aquel que le hizo su homólogo Dave Holland en su composición Mr. B. Este de ahora, en cambio, es el más completo; el que se le hace a un personaje honorable.
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